lunes, 12 de septiembre de 2011

Testigo protegido complicó a los imputados de juicio por apropiación

(Fuente: Télam)

Un testigo protegido, ex integrante del Destacamento de Inteligencia 144 de Mendoza, declaró este mediodía que el suboficial del Ejército Luis Tejada fue el autor del secuestro de un bebé hijo de desaparecidos durante la dictadura militar.
Antonio Eduardo Cruz, el testigo protegido, declaró ante el Tribunal Oral Federal de San Juan, en el juicio contra Tejada y su esposa Raquel Quinteros, por la apropiación de Jorge Martínez Aranda, hijo de los desaparecidos Francisco Goya, conocido como "Oly", y su pareja, la ciudadana mexicana Lourdes Martínez Aranda.
“Tejada se llevó a Jorgito” de la sede militar mendocina, dijo Cruz ante el tribunal, al tiempo que sostuvo que el desaparecido Francisco Goya “fue torturado salvajemente”, porque “escuché sus gritos de dolor en la Planta Transmisora de Radio Nacional, ubicada en el distrito El Sauce” de Mendoza.
Cruz había sido citado previamente en el juicio que se ventila en San Juan por los periodistas Diego Martínez, de Página 12, y Rodrigo Sepúlveda, de Radio Nacional Mendoza, quienes dijeron que escucharon su relato a fines de 2006 en un estudio jurídico de Mendoza.
El testigo dijo que “no había hablado antes a pesar de que quise hacerlo, porque no tenía seguridad y porque cuando yo salí del Ejército me dijeron: Si hablás, morís...”
Cruz aseguró que “todos estos años me he sentido mal, porque esto es una terrible carga emocional para mi que soy papá, abuelo y tengo un profundo amor por el género humano y soy profundamente cristiano”, y que “hay mucha gente que está en las mismas condiciones mías, pero que no habla porque les dijeron que los van a matar”.
En su extensa declaración, el testigo protegido aseguró que “a Oly Goya; su compañera, una mexicana morocha y delgada; y a su hijo Jorgito, los secuestraron en el paso fronterizo de Mendoza y los llevaron a una casa que tenían prestada del Ferrocarril Belgrano en Punta de Vacas", donde dijo que “le dieron una primera zurra...”
Dijo que el Ejército “recibió la información de la Gendarmería Nacional de que esta pareja venía con pasaportes falsos en un colectivo de transporte público desde Chile a la Argentina”.
El hombre que reservó varios de sus datos personales y se excusó de dar nombres de oficiales militares, destacó que “entre los juguetes de Jorgito, venían pegadas instrucciones para armar cámaras fotográficas e instrucciones para armar una radio de onda corta”.
Cruz aseguró que al desaparecido Francisco Luis Goya “lo colgaron del cuello con un cinturón de un palo del techo de la casa hasta que se puso morado y le preguntaban qué carajo andaba haciendo con pasaportes falsos”, y que después pudo ver “las marcas que tenía el muchacho en el cuello.
Según el testigo, a Goya y su pareja “los llevaron al Centro Clandestino de detención que había en la Planta Transmisora de Radio Nacional en El Sauce”, una localidad cercana al centro de Mendoza, y que allí vio cómo “la madre mejicana amamantaba al bebé”.
En ese lugar, dijo el testigo, “a los detenidos los interrogaban de la peor manera, les aplicaban la picana y les hacían la mojarrita, que era meterlos dentro de un tacho de 200 litros con agua para que se asfixiaran”.
Además dijo que tanto a Goya como a su mujer Lourdes Martínez Aranda y otros detenidos “eran trasladados al Batallón 601 de Buenos Aires, que dependía del CRIM, en un avión Guaraní aportado por la Cuarta Brigada Aérea de Mendoza”.
El ex miembro del Destacamento militar aseguró que “después llevaron al niño a la sede del destacamento en la ciudad de Mendoza”, y que “allí el niño lloraba y el suboficial Tejada se vio conmovido a pesar de ser un hombre duro”.
Según Cruz, él fue testigo de que “Tejada casi con llanto, le pidió por teléfono al coronel Julio César Bellene que le diera el niño”, y que “entiendo que lo hizo por amor y solidaridad, porque calculo que él sabía lo que le iba a pasar a sus padres”.
El testigo, con la voz entrecortada, aseguró que estaba “convencido de que él (Tejada) lo hizo por compasión por el niño, porque hacía poco que se había casado y no podían tener familia” y que estaba “seguro que lo hizo por amor, porque lo vi conmovido”.
Ante una pregunta el testigo dijo que la esposa de Tejada, la imputada Raquel Quinteros, “creo que al principio no estaba de acuerdo, pero pienso que después lo aceptó porque los padres no aparecieron mas”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario