miércoles, 18 de diciembre de 2013

Casación confirmó las condenas dictadas contra Tejada y Quinteros, apropiadores de Jorge Guillermo Goya Martínez Aranda

(Comunicado de prensa)
Abuelas de Plaza de Mayo comunica que la Cámara de Casación confirmó ayer las condenas dictadas por el Tribunal Oral de San Juan contra el ex militar Luis Alberto Tejada y su mujer, Raquel Josefina Quinteros, apropiadores del hijo de Francisco Goya y María Lourdes Martínez Aranda, Jorge Guillermo.
Aunque celebramos que la Casación valoró el recurso presentado por la querella de Abuelas de Plaza de Mayo y enfatizó que nos encontramos ante delitos de lesa humanidad, nos queda un sabor amargo porque las penas quedaron establecidas en 12 años para Tejada y 5 para Quinteros, muy por debajo de la gravedad de los delitos cometidos, por los que habíamos solicitado condenas de 23 y 18 años, respectivamente.
 No obstante, seguiremos fortaleciendo este proceso de justicia que hace años se ha abierto con las decenas de causas que persiguen los crímenes de lesa humanidad cometidos contra nuestros hijos y nietos.

Ciudad de Buenos Aires, 18 de diciembre de 2013.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Lesa humanidad: condenaron a los dos acusados en juicio oral en San Juan

Es por un caso de apropiación de menores. El Tribunal Oral Federal de esa ciudad fijó este martes la pena de 12 años de prisión para el ex suboficial de Inteligencia Luis Alberto Tejada y de 5 años de prisión para su esposa, Raquel Josefina Quinteros.

(Fuente: Centro de Información Judicial)

El Tribunal Oral en lo Criminal Federal de San Juan condenó al ex suboficial de Inteligencia Luis Tejada a la pena de 12 años de prisión, en tanto que su esposa, Raquel Quinteros, fue condenada a 5 años de prisión.
El veredicto se dio a conocer este martes, en el marco de la investigación por la apropiación de un menor durante el último gobierno de facto.
Los jueces Hugo Carlos Echegaray, Raúl Alberto Furcade y Héctor Cortés encontraron al matrimonio responsables de la apropiación del hijo de desaparecidos Guillermo Martínez Aranda y ordenaron la inmediata detención de Tejada, en una cárcel común. En tanto, otorgó la prisión domiciliaria a Quinteros.
El próximo 1º de noviembre, a las 18, se dará lectura a los fundamentos de la sentencia.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Alegatos: la querella pidió 23 años de prisión para Tejada

Para la mujer solicitaron 18 años. Quieren que la condena se cumpla en la cárcel y no en el domicilio.
(Fuente: Claudio Leiva - Diario de Cuyo)

La querella, integrada por los abogados de Abuelas de Plaza de Mayo Mariano Gaitán y María Inés Bedia, pidió ayer la pena de 23 años de prisión para el ex militar Luis Alberto Tejada y 18 años de prisión para su esposa, Raquel Josefina Quinteros, acusados de ser los autores penalmente responsables de haberse apropiado y ocultado la identidad al joven Carlos Alberto Goya Martínez Aranda, hijo de desaparecidos durante la dictadura militar.La pena es sensiblemente superior a la solicitada después por los fiscales Dante Vega y Mateo Germán Bermejo, quienes pidieron 14 años de prisión para Tejada y 8 años para su esposa. La diferencia está centrada en que para la querella se cometieron distintos hechos delictivos, es decir que fueron en concurso real, con lo cual las penas por los distintos hechos se suman y se aplica la máxima sanción prevista en el Código Penal. En cambio para la fiscalía los delitos se tipifican en concurso ideal, es decir que entiende que hubo una unidad de criterio en la comisión de los delitos y sólo se aplica la pena por el delito más grave.En lo que sí coincidieron ambas partes es que la sanción, en caso de haber sentencia condenatoria, se cumpla en un establecimiento carcelario común porque hasta ahora los Tejada están con arresto domiciliario en su casa del Barrio Camus. Pero cuando haya sentencia podría haber peligro de fuga y por eso quieren que vayan al Instituto Penal de Chimbas.Los delitos que le imputan al matrimonio son retención y ocultamiento de un menor, alteración de su estado civil, uso de documento falso y falsedad ideológica de instrumento público. Otra solicitud efectuada tanto por la querella como por la fiscalía fue que se enviaran a la Justicia los antecedentes para que los hermanos del ex militar, Oscar Alfredo Tejada y María Esther Tejada, sean investigados por el delito de falso testimonio como así también por ocultamiento del menor.Según se dijo en la audiencia de ayer que, con intervalos, se prolongó desde las 10 de la mañana hasta casi las 17, lo ocurrido con el joven Goya Martínez Aranda, según el nombre establecido por sentencia judicial, no fue un hecho aislado sino que hubo una práctica de apropiación de niños durante la dictadura militar. ‘Había una pretensión de rescatar de la subversión a los niños para implantarlos en familias adeptas al proceso militar‘, dijo la abogada Bedia.Pero gracias al trabajo de Abuelas se han podido rescatar 105 chicos de un total de 500 casos que se calculan que hay en el país.Sobre la responsabilidad de Tejada, la querella sostuvo que ‘era obvio que no podía desconocer los orígenes del niño del que se apropió‘. Y sobre su mujer la querella señaló que ‘también conocía el origen del niño‘, desvirtuando así la teoría desplegada por la defensa en el juicio según la cual la mujer desconocía que Martínez Aranda era hijo de un matrimonio de desaparecidos integrado por Francisco ‘Oly‘ Goya y María Lourdes Martínez Aranda. ‘Podrá discutirse cuánto conocía Quinteros de la situación de los padres del joven, pero basta que conozca que era hijo de desaparecidos‘, dijo la querella.Sobre otro argumento utilizado por los abogados defensores Humberto Conti Pico y Eduardo San Emeterio, basado en el testimonio del joven en el sentido de que le dieron una buena vida, la querella sostuvo que ‘fue una conducta inadmisible de mentiras permanentes‘. ‘El buen trato no es un atenuante porque le impidieron conocer la verdad‘, expresó.La fiscalía hizo hincapié en que los integrantes del matrimonio Tejada llevaron adelante ‘un plan común‘ en el que cada uno ejecutó una parte. ‘La señora cuidada al niño mientras él trabajaba, pero él fue el encargado de inscribirlo‘ en el Registro Civil de Rivadavia.Para la penúltima audiencia del juicio, prevista para el martes 25 de octubre, a las 9.30, se producirá el alegato de los abogados defensores, después vendrá la réplica de las partes y luego se les dará la oportunidad a los acusados de dirigir sus últimas palabras el tribunal. Después vendrá la sentencia del juicio, el primero por delitos de lesa humanidad en San Juan.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Un represor dijo ante la Justicia que se apropió de un niño durante la dictadura “por orden superior”

El suboficial de inteligencia del Ejército, Luis Tejada, acusado de apropiarse de un bebé en Mendoza durante la dictadura, dijo ante el Tribunal que lo juzga que tiene al niño “porque el teniente coronel Brocca me dio la orden de que me hiciera cargo de él”.

(Fuente: Télam)


El militar que junto a su esposa, Raquel Quinteros, está siendo juzgado en San Juan por la apropiación de Jorge Guillermo Martínez Aranda, hijo de los desaparecidos Francisco Goya y la mexicana María Lourdez Martínez, declaró este lunes en el cierre de los testimonios del proceso iniciado en agosto pasado.

En su declaración, formulada con el uso de un laringófono debido a que padece de una enfermedad que le impide hablar normalmente, el suboficial Tejada aseguró que el teniente coronel Juan Rodolfo Brocca, que fue Jefe del Destacamento 144 de
Inteligencia de Ejército de Mendoza entre enero de 1979 y setiembre de 1980, primer le ordenó “tener el niño tres o cuatro días” y que después le dijo que se lo quedara “y que no pregunte más nada”, al tiempo que juró que no supo el origen del bebé.

El militar retirado reconoció ante los jueces que le mintió a su mujer, la también procesada Raquel Quinteros, y que cuando llegó con el niño a su casa en Mendoza “le dije que el niño era producto de una relación prematrimonial con una chica que me lo había dejado porque no lo podía mantener”.

Tejada dijo que “hubo una discusión pero con el tiempo las cosas se normalizaron y no hubo más inconvenientes” y que “como pasaban los días y el coronel no me decía nada, le pregunté tres o cuatro veces hasta que me dijo que me lo dejara y que no le preguntara nunca más nada sobre el niño”.

El suboficial apropiador, aseguró ante una pregunta de los jueces que “era una orden directa que tenía que cumplir”, que “nunca vi a los padres del chico” y que en aquellas épocas, “las ordenes se cumplían o no se cumplían” y que él lo hizo porque me podían tirar el Código Militar encima y acusarme de insubordinación”.

Dijo que ocultó durante más de 30 años la verdad de los hechos “porque tenía que morir con el secreto porque era una cuestión personal” y que gestionó para inscribirlo personalmente y “le di un nombre para poder darle una cobertura social al niño, ya que cuando me lo entregaron estaba vestido con un buzo rojo y había un bolso con ropa, pañales y una mamadera pero no había documentos ni ningún papel”.

Frente a la pregunta del fiscal Dante Vega, el militar acusado dijo que no gestionó su adopción “porque adoptar era más complicado. Yo quería evitar sospechas, que alguien preguntara su origen. No quería comentarios fuera de lugar o que alguien pudiera sospechar algo”.

El suboficial apropiador dijo que para gestionar la inscripción en el Registro Civil le pidió al médico Antonio Achem Karam un certificado de nacimiento, porque le debía un favor, ya que un tiempo antes, él había encontrado un sobre del médico que supuestamente contenía documentación importante para el profesional.

Según el imputado, el médico ginecólogo ya fallecido, le entregó “un certificado de nacimiento con fecha 26 de agosto de 1980 con la referencia de que había nacido en la clínica donde él trabajaba en la calle Catamarca entre Santa Fe y Córdoba” de la ciudad de San Juan.

Con ese documento, Tejada tramitó la inscripción “en el Registro Civil de Rivadavia”, donde dijo que “hice los trámites solo”, sin la participación de terceros.

Por otro lado, Tejada negó terminantemente haber conocido a los progenitores del joven Jorge Guillermo Martínez Aranda, los desaparecidos Francisco Luis Goya, un militante montonero, y la mexicana María Lourdes Martínez, militante del PC de su país y también aseguró que tampoco los interrogó.

Con la declaración del imputado, finalizaron los testimonios que recibirá el Tribunal, ya que la esposa de Tejada, la imputada Raquel Quinteros, adelantó que no declarará en el proceso.

Según lo dispuesto por los jueces, los alegados de la querella y la fiscalía, luego el 18 de octubre se escuchará el alegato de la defensa y en ésa misma jornada se conocerá el veredicto, mientras que los fundamentos serán expuestos el 25 de octubre.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Un testimonio clave en la tercera jornada del juicio por apropiación en San Juan

(Por Marcela Oliva)

El 12 de septiembre, en el comienzo de la segunda semana del juicio oral de la causa Tejada- Quinteros por la apropiación Jorge Guillermo Martínez Aranda, comparecieron ante el tribunal oral los periodistas Diego Martínez, que actualmente desempeña su trabajo en Página 12, y Rodrigo Sepúlveda, documentalista y periodista de Radio Nacional de Mendoza.
Sus declaraciones aportaron datos sobre una reunión clave en el año 2006 con un agente de inteligencia arrepentido que pedía protección para declarar todo lo que sabía. En esa reunión en Mendoza, con cuatro abogados más y los dos periodistas antes mencionados, el “arrepentido”, que se presentó como “Esteban”, dio datos precisos sobre la detención de Francisco Goya y María Lourdes Aranda y la apropiación de su hijo Jorge Guillermo.
Al terminar la declaración de los dos periodistas, el abogado querellante realizó la petición de que declarara el “arrepentido “, pues se encontraba en las instalaciones bajo el programa de identidad reservada. Luego de deliberar, el Tribunal aceptó que prestara testimonio.
El testigo “arrepentido” es un ex agente de inteligencia del Destacamento 162 (antes 144) de la provincia de Mendoza, Antonio Eduardo Cruz. Al momento de prestar declaración, hizo referencia a que conocía a Luis Tejada y a su esposa Raquel Quinteros, dijo que Tejada era el jefe de la sección donde trabajaban, que era encargado del pelotón Comunicaciones y del Grupo Escucha, y que llevaban una buena relación de compañeros, a tal grado que fue invitado a su casamiento con Quinteros.
Luego se refirió puntualmente a Francisco Goya, a María Lourdes Martínez Aranda y a su hijo Jorge Guillermo. El testigo aportó como dato que habían llegado por Punta de Vacas, en Mendoza, que fueron detenidos por portación de pasaportes apócrifos, que los llevaron a una casa que pertenecía al ferrocarril General Belgrano donde a Francisco -alias “Oly”- le dieron la primera “zurra” y que Francisco fue torturado con picana y otros métodos. El ex agente de inteligencia vio a Francisco y María Lourdes nuevamente en otro centro clandestino de detención, que funcionaba en la Planta Transmisora de Radio Nacional de Mendoza. Incluso, presenció cuando María Lourdes amamantaba a su bebé, ya que Jorge Guillermo permaneció con ella aproximadamente 48 horas.
El testigo relató que “Tejada se conmovió y, casi llorando y con la voz quebrada, le pidió al Coronel Julio César Bellene, segundo jefe del Batallón 601y superior de Tejada, que le diera el niño”.
Durante su declaración, que duró más de tres horas, Cruz no dio nombres de otros involucrados y se excusó diciendo que luego lo haría ante quien corresponda, en privado, para que “no se escapen”.

martes, 13 de septiembre de 2011

La semana que viene declaran apropiado y apropiador

El Tribunal Oral Federal dejó abierta la posibilidad de que en los primeros días de la semana que viene, Jorge Martínez Aranda y su apropiador el suboficial Luis Tejada, puedan declarar en el final del juicio oral y público.
Telam


Ambos testimonios fueron ofrecidos hoy por el abogado defensor Humberto Conti Pico ante los jueces, en el marco de la cuarta jornada del juicio contra Tejada y su esposa Raquel Quinteros por la apropiación de Jorge Martínez Aranda, hijo de los desaparecidos Francisco Goya, conocido como “Oly” y su pareja, la mexicana Lourdes Martínez Aranda.

En la jornada, los jueces decidieron que Jorge Martínez Aranda declarará el lunes que viene y que al final de las testimoniales, posiblemente el martes, lo haga el suboficial Tejada.

Así surgió de un acuerdo al que los jueces Hugo Echegaray, Raúl Fourcade y Héctor Cortés llegaron con la Fiscalía, la querella y el abogado defensor, donde los abogados querellantes pidieron que sea solamente el Tribunal el que interrogue al joven apropiado “para no causar más daños a quien resulta la víctima del delito que se investiga”.

Por otra parte, quedó definido de parte de la defensa, que la imputada, Raquel Quinteros, no declarará en el juicio y que el lunes a primera hora declare la titular del Banco Nacional de Datos Genéticos, María Belén Rodríguez Cardozo, que debió hacerlo hoy, pero que “por cuestiones de agenda pidió una postergación de su declaración”, según se informó oficialmente.

Al término de ése testimonio, podría escucharse a Jorge Martínez Aranda a quien el juez Ariel Lijo le devolvió en 2008 su verdadera identidad, ya que había sido anotado en el Registro Civil de San Juan como Carlos Tejada en 1980.

Con esos dos testimonios se daría finalización a la recepción de declaraciones de testigos y el Tribunal le dará la oportunidad a ambos imputados para que declaren, algo que no han hecho hasta ahora en ninguna de las instancias del proceso judicial.

Hoy solamente hubo dos testigos frente a los jueces, de los cuales el primero fue Ramón Echegaray, un empleado público de 64 años que fue testigo del allanamiento que en 2008 la Policía Federal hizo a la casa de los Tejada.

El testigo reconoció su firma en el acta redactada durante el allanamiento realizado para recolectar compulsivamente un cepillo de dientes y ropas íntimas sin lavar que permitieran hacer un ADN y contrastar sus resultados con los ADN de sus medio- hermanos Emilio y Juan Manuel Goya y su tío Juan Carlos Goya.

El testigo ratificó los detalles del operativo que ya había relatado el día anterior a los jueces, el oficial principal de la Policía Federal Carlos Garaventa, mientras que el otro testigo civil de los hechos, Guillermo Ariel Sánchez, fue desistido por la Fiscalía.

Finalmente, fue llevada al estrado María Eva Páez, quien en 1980 trabajaba a cargo del Registro Civil de Rivadavia y es quien firma el Acta de Nacimiento con la que los Tejada le dieron a Jorge Guillermo Martínez Aranda, otra identidad, al anotarlo con el nombre de Carlos Tejada.

La mujer explicó los requisitos para inscribir un bebé de parte de un matrimonio, pero no pudo explicar porque se hizo en la dependencia del departamento Rivadavia, cuando el matrimonio residía en Mendoza.

Tras recibir esas declaraciones, los jueces determinaron pasar a un cuarto intermedio hasta el lunes a las 9, en que seguirán las audiencias en el entrepiso del Rectorado de la Universidad Nacional de San Juan.

Según testigo, Tejada pidió el bebé mientras lo torturaban al padre

Ayer dio su testimonio un testigo protegido que dijo que vio en Mendoza a la pareja de Goya y Martínez y al bebé.

Fuente: Claudio Leiva - Diario de Cuyo

Antonio Eduardo Cruz, un ex agente del Servicio de Inteligencia de Mendoza que declaró ayer amparado por el sistema de protección de testigos, dijo que vio a la pareja de Francisco Goya -quien fue duramente torturado-, Lourdes Martínez Aranda, y a su bebé en un centro de detención de la vecina provincia. Y que Luis Alberto Tejada, el ex oficial acusado de apropiarse del bebé junto a su esposa, que era su superior, pidió quedarse con el recién nacido, que por aquel entonces tenía entre 10 y 12 meses, porque su mujer no podía quedar embarazada.

La declaración de Cruz, quien dijo que había pedido protección porque cuando dejó el servicio le advirtieron que “si hablás, morís”, fue la sorpresa en la tercera jornada del juicio oral y público que el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de San Juan les sigue a Tejada y a su esposa, Raquel Josefina Quinteros, acusados de haberse apropiado del bebé hijo de la pareja que hasta hoy permanece desaparecida.

Cruz, quien dijo que es la primera vez que declara ante la Justicia para contar muchos de los secretos a los que tuvo acceso durante su paso por el servicio de inteligencia que funcionaba en Mendoza en el ámbito del Ejército, está bajo el régimen de testigos protegidos (ver aparte) y por eso se prohibió a la prensa que le tomaran imágenes. Incluso se tomaron precauciones para que no aparezca en el video que está haciendo el Creacom, dependiente de la UNSJ, de este juicio histórico.

Su declaración no estaba prevista, pero dos periodistas, Diego Martínez, de Página 12, y Rodrigo Sepúlveda, de Radio Nacional de Mendoza, que declararon previamente, contaron que se entrevistaron con él en el 2006, y adelantaron algunos datos que había aportado Cruz, aunque ante ellos se había presentado como Esteban. Luego la querella ofreció el testimonio, ante la protesta del abogado defensor de los Tejada, Humberto Conti Pico, quien dijo que era un testigo traído a último momento.

Cruz dijo que desde 1978 a 1996 fue radioperador en el Destacamento de Inteligencia 162 de Mendoza, ex 144 y que Tejada era su jefe, encargado del Pelotón Comunicaciones y del Grupo Escucha. Mencionó que hacían “escuchas” de lo que definió como la oposición, pero que él era un “cachiche”, un poco más arriba que el que barría.

Como parte de su tarea, en una época que ubicó entre el ‘80 o el ‘81, dijo vio en el destacamento de inteligencia en el que trabajaba, en el centro mendocino, un bebé, de nombre “Jorgito”, hijo de la pareja de Goya y de su mujer mexicana, a quienes había detenido en Punta de Vacas porque querían ingresar al país con pasaportes falsos. Y que a Goya le habían dado una primera “zurra” en un centro de detención que había en Punta de Vacas, donde a Goya “lo colgaron del cuello con un cinturón en el techo hasta que se puso morado y recién después lo bajaron”. También contó que a los detenidos los torturaban con picana y con lo que definió como la “mojarrita”, un procedimiento en el cual al detenido lo introducían de cabeza en un tacho de 200 litros lleno de agua hasta que casi se asfixiaba.

A la pareja de Goya y Martínez con su bebé los vio en otro centro de detención que funcionaba en la planta transmisora de Radio Nacional de Mendoza, ubicada en El Sauce. Allí dijo que incluso vio cómo la madre amamantaba a su pequeño hijo.

Sobre Tejada, aunque Cruz primero lo situó en el momento en que torturaron a Goya, después aclaró que el ex oficial sólo participó en un interrogatorio junto a un oficial que mencionó como “el negro Ramírez”. Pero que nunca lo vio participar en sesiones de torturas a detenidos.

Después el testigo dijo que Tejada “casi con llanto, le pidió por teléfono al coronel Julio César Bellene que le diera el niño”. Bellene era el segundo jefe del Batallón 601, y superior de Tejada.

En varios pasajes de su larga declaración, que se prolongó por más de 3 horas, Cruz se excusó de dar nombres de otros militares y civiles que participaban en las operaciones por temor “a que se escapen”.